Si querías una Play Station para estas navidades, los reyes magos tendrán que ser aún más magos que otros años. No se encuentran en ninguna parte. Y la culpa es de los bots. Los bots que compran Play Stations (y en general todo producto que tenga mucha demanda) para luego revenderlas multiplicando su precio vía otros canales (ej. Wallapop).

Para hablar de este tipo de bots (scalping bots en inglés), me llamó Marimar Jiménez de Cinco días. Podéis leer parte de lo que comentamos en el artículo: “Los bots cazadores de gangas adulteran las compras a través de internet“. A continuación os amplío la información que aparece en el artículo con otros links y reflexiones adicionales sobre el tema en formato “auto-entrevista” y con un enfoque más técnico que el qué pude dar a los lectores de Cinco días:

  • ¿Cómo funcionan estos bots?. Pues haciendo lo mismo que tú. Es decir rellenan los formularios, hacen click en los botones y hasta, si es necesario, pueden llegar a resolver algún captcha (aunque esto último ya es de nota). Conseguir que un bot interactúe con una web como un humano no es difícil. Herramientas como Selenium hace tiempo que se utilizan para testear aplicaciones web simulando escenarios de interacción de posibles usuarios con una aplicación web para comprobar que la aplicación web se comporta correctamente. La extensión de Chrome de Selenium permite incluso grabarte utilizando una web y guardar esa grabación como un test a reproducir después. De ahí a convertir ese script en un bot sólo hay un paso. El bot puede simplemente avisarte cuando “vea” que hay de nuevo estoc disponible (rellenando los campos de búsqueda por tí y mirando el resultado de la página que devuelve el formulario) o completar la compra.
  • ¿Un mismo bot sirve para cualquier web y producto?. No. Estos bots no son realmente bots inteligentes sino que son más bien scripts de automatización de tareas. No “entienden” realmente la web con la que interactúan. No tienen ningún conocimiento de lo que hacen. Simplemente buscan en el HTML de la página los elementos que tienen que rellenar/clicar y lo hacen siguiendo las instrucciones del script. Si una página cambia el nombre (o id) del botón de “comprar” por el de “quédatela”, la gran mayoría de los bots dejaran de funcionar. Hay que adaptar el bot a cada página, y a cada evolución de esa página.
  • ¿Algún ejemplo de bot que sea software libre?. Puedes mirar éste o éste, los dos para NVIDIA. Hay alguno  más pero tampoco muchos. Los que se ganan la vida vendiendo o alquilándolos no quieren, obviamente, que sea muy fácil hacer uno. De hecho alguno de estos lo han publicado personas que están en contra los bots. Su tesis es que cuanto más gente pueda hacer uno, peor será el negocio para los que se dedican profesionalmente a esto y por lo tanto acabaran abandonando.
  • ¿Es legal crear un bot que compre por Internet?. Sí. O mejor dicho, no es ilegal. Como mínimo no en España. En otros países se ha intentado alguna iniciativa legal para frenarlos pero es difícil ya que al final también depende de donde esté alojado el servidor que utilice el bot. Un caso clásico de “poner puertas al campo”. Otro tema es que sea legal después ganar dinero revendiendo los productos comprados.
  • ¿Por qué Sony y los distribuidores no ponen más trabas a los bots?. Sin ánimo de crear mucha controversia, al final ellos siguen vendiendo las Play. Les da igual que detrás haya un robot o una persona, el dinero lo ganan igualmente. No digo que les haga ilusión que los fans se cabreen pero al final esta escasez le da a su producto un aire aún más exclusivo que puede generar más ventas futuras. Por lo que respecta a los distribuidores, los incentivos para evitar los bots son aún menores. Si una página impone medidas de protección fuertes, los bots irán a otra que sea más fácil con lo que evitar los bots generará perdidas al distribuidor.
  • ¿Cómo se podría evitar el uso de bots para la compra online? Si se quisiera (ya acabamos de ver que no), tampoco es fácil parar los pies a los bots. Se lo puedes poner más difícil, exigiendo un mayor nivel técnico y reduciendo el ratio de éxito con lo que como mínimo evitas el “revendedor amateur”. Pero impedirlo completamente es más un tema social que técnico. Por ejemplo, verificando la identidad del comprado, limitando el número de productos por dirección física, el número de compras por tarjeta de crédito…
  • ¿Es seguro utilizar un bot para comprar online?. Si el bot lo has hecho (o comprado) tú, en general sí. Lo máximo que te puede pasar es que te cancelen la compra. Si lo que haces es alquilar los servicios de alguna granja de bots para que se encarguen de comprarte el producto que tu quieres, recuerda que les estás dando todos los datos de tu tarjeta de crédito para hacerlo. Lo que yo ya no veo tan seguro es revender el producto comprado triplicando su precio a un consumidor frustrado por no haberlo conseguido comprar a su precio real por tu culpa. No vaya a ser que en el momento de hacer el intercambio te encuentres con alguna sorpresa.
  • ¿Esto no pasaba ya antes? Sí. La reventa de entradas para conciertos ha existido toda la vida. La gente hacía horas de cola para comprar muchas entradas con la esperanza que el día del concierto hubiera muchos fans desesperados por asistir al concierto y pagar lo que fuera por entrar en el recinto. Como en todo, la tecnología ha simplemente acelerado el proceso. Y el COVID ha hecho el resto: con tanta gente en paro (o ERTEs o lo que sea), mucha gente intenta maneras de conseguir dinero fácil y rápido (otra cosa es que sea así).