Soy un fan de Scratch (¿y quién no?). Y como promotor de las técnicas de modelado software, aprecio las ventajas de la programación por bloques. También reconozco que este tipo de paradigma de programación no es sólo para niños, muchos profesionales pueden llegar a hacer cosas muy chulas (por ejemplo ciencia de datos con TidyBlocks). Pero para los que quieran profundizar en la programación, hay un momento en que Scratch se queda pequeño. Y meterse con un lenguaje de programación general (como Java, python, JS,….) es un salto que asusta.

Obviamente, es posible hacerlo. De hecho, ya llevaba unos años programando cuando nació Scratch. Soy de la generación BASIC (y sin el “Visual” 🙂 ). Pero esto no significa que no haya mejores maneras de hacerlo. Este tipo de cambio brusco puede desmoralizar a futuros programadores y darles la sensación que esto del software es muy difícil.

Llevo un tiempo mirando que opciones hay para facilitar la transición, ya que, crucemos los dedos, espero tener este “problema” en casa con mis hijas en los próximos años. Y creo haber encontrado la solución en Hedy. Hedy es un lenguaje de programación gradual. Que simplificado quiere decir que te permite aprender las reglas y conceptos de programación paso a paso. Por ejemplo sin forzar una sintaxis estricta al comienzo que podría distraerte. Mejor entender que es un condicional sin tener que preocuparte por el tipo de paréntesis a utilizar. De esta forma, cada concepto se aprende incrementalmente, primero de una forma muy básica y luego viendo paso a paso como aprovechar toda su potencia.

He pasado un par de horas con mis hijas esta tarde jugando con Hedy y me ha sorprendido mucho ver como llegaban a entender bien los ejercicios. Incluso conceptos abstractos como el de variable conseguían entenderlo (a tener en cuenta que mi hija mayor tiene nueve años) y eran capaces de modificar el programa de ejemplo utilizando esas variables para cambiar el comportamiento o recorrer una cierta parte del código dependiendo del resultado del if.

En este vídeo, Felienne, explica muy bien los conceptos que la motivaron a crear el lenguaje:

Sin ser, ni mucho menos, un experto en la enseñanza de la programación, Hedy me parece una opción muy interesante para los niños (y no tan niños) que quieran iniciarse en los principios básicos y las estructuras más comunes que encontrarán después en cualquier lenguaje serio que quieran usar en el futuro. Hedy se ejecuta directamente en el navegador con lo que no hay que instalar nada. El entorno en sí está disponible en Español pero el lenguaje es en Inglés. Hedy es software libre, en su repositorio en GitHub podéis encontrar también una descripción más extensa del lenguaje y la lista de niveles de práctica que incluyen por el momento para ayudarte a aprender.

Como siempre, si tenéis otras opciones que os parezcan interesantes para esta “travesía del desierto”, encantado de descubrirlas.